lunes, 30 de agosto de 2010

Es hora, otra vez

Es hora de descansar. La vida se compone de rituales cíclicos y las vacaciones son uno de ellos. En septiembre empiezo a hacer lo mismo de otra manera, sin el agobio del reloj. Me levantaré tal vez un poco más tarde de lo habitual pero compraré el periódico como todos los días. Durante cinco días visitaré otra localidad para enseguida volver a la ciudad en la que vivo durante todo el año. Procuraré leer algún libro que aguarda años que abra sus páginas, pero no leeré más que otros meses. Y compartiré faenas de la casa posiblemente con un poco más de dedicación que de costumbre. Y cuando quiera darme cuenta deberé reincorporarme al trabajo donde trataré de convencer a mis compañeros de lo placentero que fue mi descanso. Entonces tal vez vuelva a desear que un nuevo ciclo de vacaciones retorne pronto. Para hacer lo mismo. Porque es hora. Otra vez.

No hay comentarios: